All Sermons
Bible Passage
This content is part of a series Camino en la Sucesión, in topics Audios, Videos & .

Episodio 84: San Simplicio, custodio de la fe en tiempos de caída imperial

  • Segundo Álvarez
Date preached October 2, 2025
  1. Contexto histórico

San Simplicio fue Papa entre 468 y 483 d.C., en los años finales del Imperio Romano de Occidente. En 476, durante su pontificado, se produjo la célebre deposición de Rómulo Augústulo, el último emperador romano de Occidente, por el caudillo bárbaro Odoacro.

Roma dejaba de ser capital política, pero la Iglesia, y en particular el Papa, emergían como la autoridad moral y espiritual que mantenía viva la continuidad con el pasado apostólico.

  1. Sucesión apostólica y autoridad doctrinal

San Simplicio defendió con firmeza las decisiones del Concilio de Calcedonia (451) contra el monofisismo, que aún agitaba a las Iglesias de Oriente.

  • Recordó que la fe de Calcedonia –Cristo verdadero Dios y verdadero hombre en una sola Persona– era la fe de Pedro y de la Iglesia universal.
  • Sus cartas a los obispos de Oriente muestran cómo Roma se erigía en referencia doctrinal y disciplinar, incluso cuando la autoridad imperial ya no podía garantizar la unidad.
  1. Principales contribuciones y legado
  • Defensa de Calcedonia 🛡️
    Confirmó las definiciones cristológicas frente a las presiones de algunos patriarcas de Oriente que buscaban compromisos ambiguos.
  • Apoyo a las Iglesias de Oriente ✉️
    San Simplicio mantuvo correspondencia con Constantinopla y Alejandría, defendiendo a los obispos fieles a la ortodoxia y rechazando a quienes favorecían el monofisismo.
  • Continuidad del ministerio en Roma 🕊️
    En un tiempo sin emperador en Occidente, la figura del Papa adquirió una relevancia nueva: la de ser el garante de la estabilidad y la fe apostólica en medio del vacío político.
  • Liturgia y disciplina
    Según testimonios posteriores, San Simplicio promovió la dedicación de varias basílicas romanas y reforzó la centralidad de la liturgia como signo de comunión.
  1. Dimensión apologética

El pontificado de San Simplicio es una enseñanza clara: cuando las estructuras políticas caen, la Iglesia permanece.

  • La sucesión apostólica no depende de la estabilidad de los reinos, sino de la fidelidad a la misión confiada por Cristo a Pedro.
  • Roma se convierte en faro de unidad en medio de la oscuridad cultural y política.

📌 Conclusión:
San Simplicio fue el Papa que acompañó la caída del Imperio Romano de Occidente, pero lejos de significar el fin de la historia, su pontificado mostró que la Iglesia trasciende los imperios. Su defensa de Calcedonia y su cuidado de la comunión eclesial hicieron de él un verdadero custodio de la fe y pastor universal, garantizando que la herencia apostólica no se perdiera en el caos de la historia.

In series Camino en la Sucesión